Los láseres de diodo SWING también se usan a menudo en cirugía proctológica. Las hemorroides son dolencias muy desagradables para el paciente, cuyo tratamiento con métodos tradicionales es largo, engorroso y, a menudo, poco efectivo. El uso de láseres de diodo acelera en gran parte el tiempo de tratamiento y proporciona resultados más prolongados y mucho mejores.
La longitud de onda de 1470 nm tiene un alto grado de absorción en el agua de los tejidos con efectos simultáneos en la sangre. Esta propiedad biofísica hace que la zona de ablación sea poco profunda y controlada, lo que no genera riesgo de daño a los tejidos adyacentes.
El procedimiento se realiza utilizando una fibra sagital, que se caracteriza por una reducción significativa en la emisión directa de energía de radiación (a diferencia de las fibras sin recubrimiento). La energía entregada desde la punta de la fibra sagital garantiza una ablación tisular homogénea, sin penetrar más allá del área terapéutica planificada. El diseño de la fibra óptica permite su inserción en el paquete hemorroidal sin causar lesiones.
Otros procedimientos proctológicos que se pueden realizar eficientemente con el láser SWING son los quistes pilonidales, las fístulas rectales y las fisuras anales.